De cara a obtener el certificado halal, los requisitos son bastante estrictos porque los consumidores necesitan estar seguros de que los productos que van a tomar se amoldan a lo establecido por la sharia.
“Halal” deriva del árabe y significa justamente eso, permitido o lícito, y es un término que hace referencia a todo aquello cuyo consumo y utilización está permitido a la comunidad islámica.
Por qué es necesario tener el certificado halal
El certificado halal acredita que un producto es apto para su consumo por parte de musulmanes. La regla general es que todos los alimentos son halal, pero existen una serie de excepciones catalogadas como haram. Algunos ejemplos son el cerdo, el alcohol y otros productos tóxicos, los animales sacrificados incorrectamente o los animales carnívoros. Todos estos deben quedar fuera de la dieta de quienes siguen la sharia.
Lo que hace esta certificación es verificar que los productos o servicios que se ponen a la venta cumplen con los estándares halal, es decir, que se han elaborado con ingredientes adecuados y que en su procesamiento se han empleado equipos y utensilios limpios.
Así, se garantiza la trazabilidad completa dentro de la cadena alimentaria, desde que el animal está en su lugar de origen hasta que llega al plato de quien lo va a consumir. Por eso, se presta especial atención tanto al proceso de producción como al de manipulación y al logístico.
En un negocio que venda o utilice productos halal, el certificado es especialmente importante para ofrecer sus productos a la comunidad musulmana, un mercado muy importante que sigue creciendo a nivel mundial.
Los productos halal tienen más de 1800 millones de potenciales clientes en todo el mundo, 44 millones solo en Europa. En el caso de España, el potencial de clientela para estos productos es de 4 millones entre residentes y turistas.
Contar con el certificado permite superar las barreras a la internacionalización, ya que en algunos países contar con esta certificación es algo totalmente obligatorio para poder comercializar productos y servicios.
Requisitos para obtener el certificado halal
Su obtención requiere un proceso más o menos complejo y extenso que implica pasar por una auditoría exhaustiva. Además, no existe una homogeneidad en la regulación, y para obtener el certificado halal los requisitos pueden variar según el país.
Conseguir el certificado halal en España supone pasar por una serie de auditorías en las que se lleva a cabo una evaluación documental de los sistemas de calidad y de producción. Además, se suelen tomar muestras del producto tanto durante el proceso de producción como al final.
En el caso concreto de la industria alimentaria, los productos deben cumplir una serie de condiciones. Estas que recopilamos son las más importantes:
- El producto tiene que estar libre de cualquier sustancia o ingrediente que esté prohibido.
- Se tiene que elaborar con utensilios y maquinaria adecuada. No puede estar en contacto con otros productos o sustancias prohibidas durante los procesos de elaboración, procesado, almacenamiento y transporte.
- Los animales tienen que ser sacrificados sin sufrimiento innecesario.
- Se permiten los conservantes, colorantes, aditivos o aromas que tengan la condición de halal.
- La alimentación que recibe el animal a lo largo de su vida tiene que ser de origen vegetal.
Por lo que se refiere al etiquetado, también hay un conjunto de requisitos específicos:
- La etiqueta tiene que señalar de forma expresa que se trata de un producto halal. Usando esta palabra u otros términos equivalentes.
- Las declaraciones de propiedad halal no pueden utilizarse de manera que pongan en duda la seguridad de otros alimentos, ni dar a entender que son superiores nutricionalmente hablando.
Proceso para obtener la certificación halal
Si se cumplen estos requisitos, el fabricante o productor puede iniciar los trámites para obtener la certificación. Para ello tiene que seguir estos pasos:
- Escoger una organización de certificación halal que esté reconocida en España y sea confiable.
- Contactar con dicha organización y solicitar información sobre el proceso de certificación.
- Preparar la auditoría. El análisis será exhaustivo y debe incluir una revisión de las prácticas de manipulación, de los ingredientes utilizados y de los métodos de limpieza empleados.
- Hacer los ajustes necesarios. Si tras la inspección se detecta alguna ineficiencia, hay que corregirla para amoldarse a los estándares halal.
- Tras hacer los ajustes se realizará una inspección final y, si todo es correcto, se emite la certificación. A partir de ese momento, la empresa podrá usar la misma en su etiquetado para identificar a sus productos como aptos para la comunidad musulmana.
Por normal general, el certificado tiene una validez de un año. Pasado ese tiempo hay una nueva auditoría y, si todo va bien, se vuelve a renovar la certificación por igual período.
Como ves, para obtener el certificado halal los requisitos son estrictos, pero no resultan complicados de cumplir una vez que se sabe más sobre ellos. En todo caso, lo importante es contar con una empresa certificadora de calidad y con reconocimiento internacional, como lo somos en Safety Horizon.
Si necesitas ayuda ponte en contacto con nosotros y te informamos.